La cinasa activada por monofosfato de adenina (AMP), conocida por sus siglas en inglés como AMPK, es un complejo heterotrimérico que se activa con el incremento en la relación AMP/ATP.
Disminuye o incrementa la expresión de algunos genes involucrados tanto en la lipogénesis y en la biogénesis mitocondrial, entre otros. La AMPK está presente en la mayoría de los órganos incluyendo el hígado, músculo esquelético, corazón, hipotálamo e incluso en las células adiposas. Además, la AMPK es activada en el cerebro para estimular el apetito debido a la depleción de energía. Ya que la AMPK participa en la regulación de la glucólisis, en la entrada de glucosa, en la oxidación de lípidos, en la síntesis de ácidos grasos, en la síntesis de colesterol y en la gluconeogénesis.
En el momento que algún estrés hace que disminuya la relación ATP/ADP, aumenta el contenido intracelular de AMP lo que activa a la AMPK, como ocurre durante el ejercicio, la isquemia y también en la diabetes, donde, a pesar de haber glucosa en la sangre, no puede entrar a la célula con lo que la ésta resiente la falta de energía.
Al activarse, la AMPK fosforila un gran número de proteínas lo que provoca el apagamiento de ciertas vías anabólicas que consumen energía, tales como la biosíntesis de macromoléculas, crecimiento y proliferación celular, mientras que enciende las vías que producen ATP como la glucólisis y la oxidación de ácidos grasos. Esto puede ser a través de la fosforilación de enzimas involucradas directamente en la regulación de las vías correspondientes, o a través de regular la expresión génica de la célula.